Presentación
Ni sikuta ni zaparrada, mejor sirimiri
Son tres, o cuatro –que en el fondo son tres-, los ingredientes básicos de la correcta comunicación pública: presencia, paciencia o prudencia, y perseverancia.
La presencia es fundamental. Quien no está… no está en la comunicación. Hay quien no está porque no quiere estar, porque no le interesa estar o, las más de las veces, porque no sabe estar. Pero quien quiera estar, porque le interesa estar, tiene que aprender a saber estar.
El saber estar requiere paciencia o prudencia. Impacientes e imprudentes mejor harían en no estar. No hay peor comunicación que la de quien quiere estar siempre primero, en todo momento y a cualquier precio.
Pero, paradójicamente, la perseverancia también es fundamental. La perseverancia puede y deber ser tan discreta e incisiva como el sirimiri, la lluvia fina o la gota malaya. Parece que no pero, al final, calan, melan, inciden, socavan, triunfan.
Ya lo dijo el pastor de Usartza Ni sikuta ni zaparrada, mejor sirimiri.